viernes, 25 de octubre de 2013

¿Es el hombre un ser que nace bueno y la sociedad lo corrompe o nace malo y la sociedad lo moldea para el lado de la virtud?

Nacemos neutrales, con habilidades innatas para reconocer y comprender la realidad de la energía, la realidad mental y espiritual. Con impulsos de supervivencia que caeríamos a ser sólo narcisistas, preocupados por el yo, pidiendo atención, leche, mis necesidades y caprichos así y así hasta ir distinguiendo, razonando, conociendo, aceptando y rechazando información y experiencia de acuerdo a nuestra predisposición genética y nuestro entorno, si se nos educa con amor y valores, respetándonos, prosperaremos a bien, autoaceptación, felicidad, madurez, una plena confianza en sí mismo.
 Por el contrario si nacemos y nos desarrollamos en un entorno de antivalores y sentimientos negativos y los llegamos a aceptar para moldearnos, sin tomar en cuenta lo correcto, lo bueno de afuera, no seremos personas de bien.
 Todo puede ser transformado, hacer  a la gente buena debe ser prioridad en la vida humana. La sociedad y nuestras ambiciones, nuestro ego, pueden hacer que tomemos decisiones malas y nos dejemos gobernar por la sinrazón. Ellos no nos hacen malos, nuestra falta de valores, creatividad e ignorancia no nos muestran los diversos caminos, es por ello que debemos ser  siempre curiosos para educarnos y discernir, tener nuestras propias conclusiones de todo

¿Cuál es el origen del hombre?

                La materia no se crea ni se destruye sólo se transforma
de la nada, nada puede haber.
No creo que algo tan maravilloso, tan enorme y tan vasto tenga un origen menor pues de menos no puede darse más.

Lo correcto en cualquier ciencia es que de un todo vengan sus partes, llámese primera fuente, Padre, Dios, Creador, Inteligencia Suprema, Energía Divina, entonces el hombre es producto de ello, sin negar la teoría evolutiva, atrasándonos al periodo arqueozóico, al primer prototipo de vida, a su nivel subatómico, a todos esos elementos y energía.

No creo que haya sido espontáneo pues todo está lleno de intención, sin duda hay un coautor de todo esto siempre implícito en las leyes de la física, en las matemáticas, en la incomprensibilidad de varios hechos, en esa infinita búsqueda de nuestro propósito, en el porqué de nuestra existencia y de nuestra angustia existencial.

El hombre pareciera no ser dueño de su existencia, sino que la recibe de alguien. Detras y en el universo o suprauniverso y de las leyes que lo rigen, se halla incluso en nosotros, una mente sabia que domina todo conocimiento, como las matemáticas, una inteligencia capaz de calcular, relacionar, programar y dirigir el mundo haciendo imposible que el caos llegue a anular alguna vez el orden. 
En realidad aunque vemos desorden aparente en el universo, existe un orden perfecto implícito en todo aquello que lo forma, el cosmo se hace como una inmensa red informática constituida por múltiples interruptores (sol, luna, asteroides, etc) colocados cada uno de ellos en la posición precisa para que todo funcione y sea posible la vida y la consciencia humana.


Miss palabras